Por muchos años que pasen, la cocaína seguirá siendo una de las drogas que más adicción provocan en el ser humano y, por tanto, más difícil de quitar en el centro de desintoxicación en Valencia. Esto se debe a que cuando la cocaína se consume repetidamente y de forma habitual, el cerebro se adapta y se vuelve cada vez menos sensible a la sustancia, a pesar de sus efectos inmediatos, por lo que la dosis de consumo de la droga se va incrementando gradualmente por el adicto para obtener los mismos efectos que al principio, con el consiguiente riesgo que ello conlleva.

Cuando se habla de adicción a las drogas que tratamos en el centro Llaurant La Llum, esta es quizá la que a todos se nos viene a la cabeza, por su poder destructivo y por su peligrosidad. Los efectos de la cocaína son inmediatos, muy placenteros y cortos, provocando una intensa, pero breve euforia, por lo que da la sensación también de aumentar la energía.

Pero uno de sus principales problemas viene cuando la droga se va desvaneciendo, momento en que esas sensaciones temporales de dominación se convierten en una intensa depresión, lo que se conoce como el “bajón” coloquialmente, provocando un letargo en la persona, hasta el punto de que se dan casos de personas que duermen durante varios días después de consumir cocaína.

El tratamiento en el centro de desintoxicación en Valencia va encaminado a encarar el problema desde el punto de vista psicológico, con la ayuda imprescindible de los fármacos, unión fundamental para conseguir mayor efectividad en el tratamiento de cocaína, aún sabiendo lo difícil que es salir de esa adicción.